Mamá rusa quiere sexo caliente en lugar de masaje de tetas
Luna Roulet conoce muy bien el poder curativo del masaje porque ella misma trabajó durante dos años en fisioterapia. Por eso esta noche acude a su hijastro y le pide que estire sus músculos rígidos. El tipo no se limita a esto en absoluto y excita hábilmente a la madre hasta el punto de que ella chupa una polla y se abre de piernas para tener sexo en un par de posiciones. Pero este tormentoso sexo empezó con sólo un masaje.