Le rompí las pantimedias a una rusa para entrarle el coño
Por supuesto, Diana Ryder no es virgen, pero ¿por qué anunciarlo? Pero cuando una chica encuentra una caja de consoladores en el armario de sus padres y la abre junto con su hermanastro, se excita enormemente y quiere que su hermanastro le dé un programa educativo detallado sobre el tema. Sin más, la pone a lo perrito y sólo cuando el tío, después de una larga follada, se corre en la cara de su hermana, ¡ella comprende que está jodida y quiere más!